Youtube

Quick Press: cómo lavar y planchar la crisis

La cadena venezolana de tintorerías ha iniciado una transformación de su modelo de tiendas. En agosto dará a conocer un nuevo servicio de desinfección de las prendas contra virus, bacterias y ácaros. Antes de que finalice el año estrenarán una aplicación de delivery. Y el año que viene celebrarán los 25 años con novedades

 

En mayo cumplió 24 años. Pero Quick Press, la cadena venezolana de tintorerías, no solo ha comenzado a prepararse para lo que será la gran celebración de los 25 sino que ha iniciado ya una profunda transformación de sus tiendas y de cada uno de sus procesos.   

En agosto, por ejemplo, comenzarán a ofrecer servicio de desinfección para que las prendas sean entregadas a los clientes 100% libres de virus, bacterias y ácaros gracias a la implementación de una nueva tecnología que acaban de adquirir en España a la firma Unisec; lo que, por cierto, hará más rápido y ecológico el servicio.

Antes de que finalice el año planean estrenar una aplicación móvil (app) diseñada especialmente para el servicio de delivery a través de la cual los clientes podrán informarse con exactitud en qué área de la tintorería se encuentran sus piezas y, por ende, cuándo podrán contar efectivamente con ellas nuevamente. Amén de optar a promociones y descuentos.

Y se avecinan otras novedades que José de Martín, creador de la marca y un optimista sin remedio, prefiere no adelantar sobre todo para, llegado el momento, poder agarrar entonces por sorpresa a sus clientes.  Después de todo, lo importante es celebrar y tratar de dejar atrás las vicisitudes.

Porque hay algo claro: llegar hasta aquí no ha sido sencillo. A Quick Press, que en su mejor momento tuvo 153 establecimientos en todo el país, de los cuales hoy mantiene en pie 36, le ha tocado hacer como a la mayoría de las marcas tradicionales del país: lavar y planchar la crisis a como dé lugar para que nadie se percate ni le afecten las arrugas.      

En su caso, dice Jesús Valerio, gerente de mercadeo de la marca, enfrentar con coraje sobre todo tres momentos que han sido sumamente difíciles. El primero: en 2015 disminuyeron considerablemente las ventas debido a la terrible inflación y, sobre todo, a la percepción de que la tintorería es un servicio de lujo.  La segunda: en marzo de 2019 sufrieron los apagones eléctricos y, en consecuencia, también se quedaron sin agua. Y la tercera: cuando ya estaban comenzando a recuperarse a principios de 2020, fue decretada en marzo la pandemia mundial por causa del covid-19, lo que los obligó primero a cerrar por completo las puertas y luego a abrir “una semana sí y otra no” para cumplir con el, digamos, decreto gubernamental. Y todo ello duplicado o triplicado en el interior del país.

Nada de qué arrepentirse, sin embargo. José de Martín, que nació en España en 1947, y que estudió derecho pero solo quiso ejercer durante dos años así que abrió un hotel para mascotas y una tienda de antigüedades, emprendió un largo viaje por el continente americano que le cambió por completo su historia. Desembarcó por fin en 1980 en el estado Cojedes, en Venezuela, y se enamoró de la tierra. Así que como su padre comenzó a sembrar en gran escala semillas certificadas en Portuguesa, Guárico y Cojedes, y fundó una sociedad con Palmaven y Protinal. Amén de que dirigió  la instalación de una planta procesadora de semillas con capacidad para producir 80 millones de kilos anuales.

Solo que por recomendación de su dermatólogo, de Martín se vio obligado a darle un vuelco a su vida años después. Y a su trabajo. Él, que se había expuesto al sol durante años para atender su negocio, se mudó entonces a Caracas y se le metió en la cabeza la idea de incursionar en el mundo de la tintorería.

Viajó a Europa. Adquirió toda la maquinaria en la fábrica alemana Pöwe y de ahí el slogan que mantuvo durante mucho tiempo: “Tecnología alemana con pasión latina”. Se empapó de absolutamente todos los procesos de lavado y secado y en mayo de 1997 fundó  la primera tienda en la calle Londres de la urbanización Las Mercedes, en el este de Caracas. Frente al restaurante Salón Cantón. Y fue un exitazo.

En apenas cinco años abrieron otras 100. Y en total llegaron a tener 130 establecimientos, entre tintorerías, receptorías, tiendas de costura y también de reparación de zapatos.

Las receptorías, por ejemplo, las diseñaron como pequeños negocios satélites que instalaron siempre en puntos estratégicos de la ciudad y orbitaron alrededor de los locales principales. Allí los clientes podían dejar sus textiles (camisas, pantalones, faldas y también sábanas y pieles) y recogerlos una vez que fueran procesados en la tintorería.

Mientras que las tiendas de costura y las de reparación de zapatos funcionaron de manera independiente o simplemente como anexos de las tintorerías. En la Quick Press de Las Mercedes, por ejemplo, ofrecen los tres servicios: tintorería, costura y zapatería.  Pero la Quick Press de La Trinidad, por ejemplo, está dedicada de manera exclusiva al arreglo de  calzados.

No hay una fórmula para el éxito, dice el gerente de la marca. A no ser la constancia, el empeño de poner la “mejor de las energías al trabajo” y, muy importante,  tratar de mantener siempre los precios por debajo del estándar internacional. Y por lo menos tratar de igualar los de los locales.

Algo estarán haciendo bien, pues no solo se mantiene como líder del sector sino que  sus competidores más cercanos (como la franquicia francesa 5ásec y la española Pressto) han tenido que bajar dramáticamente las santamarías en la mayoría de sus locales o sencillamente despedirse por completo.

Y se entiende: Lavar, secar y planchar una camisa (de cuello, botones y mangas largas) está hoy por el orden de los 3 dólares en Quick Press. O su equivalente en bolívares, claro.  Solo que además de “los precios competitivos”, según Valerio, Quick Press se mantiene al día con las promociones que anuncian sobre todo a través de sus redes sociales: Facebook e Instagram.

Si para los 24 años crearon una campaña de publicidad y mercadeo  enfocada sobre todo en redes sociales y radio (con énfasis en el circuito FM Center), para la celebración de los 25 años planean hacer un refrescamiento a la imagen de la marca y quizás, al menos eso es lo que deja colar, modificar su tradicional  slogan: “Simplifica tu vida: ven a Quick Press”. 


PUBLICADO: 25 de junio de 2021